¿Cuáles son las causas por las que se produce un Despido Objetivo?
Cuando un empresario pone fin a un contrato con un trabajador con un despido objetivo, debe justificar las razones de ese despido. Algunas causas se deben al trabajador y sus aptitudes para las tareas. Otras son atribuibles a la evolución y estado de la empresa misma.
Es importante destacar que un despido objetivo no representa una sanción para el trabajador, ya que las razones no son disciplinarias. El artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores define las causas por las que se puede llevar a cabo un despido objetivo.
Son las siguientes:
Causas económicas
Un despido objetivo se justifica cuando la empresa tiene dificultades económicas. La situación es negativa, con pérdidas persistentes en sus niveles de ingresos, por ejemplo.
El empresario debe demostrar que la disminución de las ganancias en ese momento o previstas para el futuro es persistente. Esto implica que se ha prolongado por un mínimo de tres trimestres consecutivos en relación al mismo trimestre del año anterior.
Causas técnicas, organizativas o de producción
Se justifican los despidos objetivos cuando la empresa ha realizado cambios técnicos u organizativos que impactan en la gestión de la plantilla de trabajadores. Hay situaciones en que cambian las demandas de los productos, y la empresa reestructura su sistema productivo, modificaciones que también tienen consecuencias para los empleados.
Despido objetivo por razones propias del trabajador
Puede ocurrir que después de firmado el contrato, a medida que pasa el tiempo el trabajador no pueda cumplir con sus tareas. Este incumplimiento se debe a falta de conocimientos o de actualización de los mismos, o a condiciones físicas o psíquicas.
También es posible un despido objetivo cuando el trabajador no consigue adaptarse a las modificaciones tecnológicas incorporadas a la empresa. En este caso, antes del despido, se deben ofrecer al empleado oportunidades de aprendizaje para adaptarse al nuevo sistema de trabajo.
¿Qué indemnización se paga por un Despido Objetivo?
La indemnización por despido objetivo se calcula en función de los años de trabajo. Corresponde pagar 20 días de salario por año de servicio, con un máximo de 12 mensualidades. Los períodos menores a un año se consideran en meses.
Esta es la indemnización que establece el Estatuto de los Trabajadores en su artículo 53. Sin embargo, en algunos casos los convenios colectivos o acuerdos de la empresa con el trabajador pueden establecer otras condiciones que favorezcan al empleado despedido.
¿Tienes más dudas? Te las resolvemos
- ¿Qué puede hacer un trabajador que es despedido por causas que no justifican el despido objetivo?
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El trabajador puede impugnar el despido. Si se comprueba que un despido no obedece a causas justificadas, se declarará improcedente o nulo. En el primer caso, la empresa puede optar por readmitir al trabajador o por pagar la indemnización. El despido nulo supone la readmisión obligatoria del trabajador.
- ¿Cómo se denuncia un despido objetivo?
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El trabajador dispone de 20 días hábiles para impugnar el despido. El primer paso es presentar una papeleta de conciliación. Si no hay acuerdo con la empresa, procederá a la denuncia penal. En este caso, será el juez quien determine si el despido es procedente, improcedente o nulo.
- ¿Se debe comunicar con anticipación al trabajador que será despedido?
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La carta de despido es un requisito imprescindible que la empresa debe cumplir. Es la comunicación escrita en la que se da aviso al empleado 15 días antes del día marcado para despedirlo.
